Los pagos móviles: la apuesta de las grandes empresas

Diversas empresas de primer nivel comienzan a trabajar para atraer a los usuarios hacia los pagos móviles

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Más de 500.000 millones de euros. Estas son las previsiones que la consultora Gartner ha realizado sobre los pagos móviles. La prestigiosa firma espera que el comercio móvil alcance esta cantidad en 2017, año en el que ya habrá 450 millones de usuarios realizando transacciones a través de sus smarpthones y tablets. Pero no hay que irse tan lejos para vivir el despegue de los pagos móviles. Al menos así se refleja en las cifras que Gartner tiene previstas para este 2013: un crecimiento del 44% en el valor de las transacciones móviles con respecto a 2012, pasando de 123.000 millones de euros a cerca de 180.000.
¿Pero cuál es la situación de España en este ámbito? En la actualidad, el camino que los pagos móviles llevan recorrido en nuestro país es lento pero seguro. Además, todo parece indicar que 2014 será un buen año para las transacciones móviles en España, ya que tanto entidades bancarias como teleoperadoras han empezado a mover ficha.

La Caixa y la tecnología NFC

Hace apenas unos días La Caixa presentaba su alianza con Visa Europe y con las tres compañías telefónicas líderes en España: Movistar, Vodafone y Orange. El grupo bancario catalán apuesta por la tecnología NFC para que sus clientes puedan realizar de manera cómoda y segura pagos a través de sus dispositivos móviles.

A pesar de las ventajas que presenta el nuevo servicio de pagos móviles de La Caixa, cuenta con un gran inconveniente: el uso de la tecnología NFC. Por el momento, tan sólo seis teléfonos cuentan con desarrollo de apps Android cuentan con esta tecnología en España: los Samsung Galaxy S3, S3 Mini, S4 y S4 Mini, el HTC One y el Sony Xperia Z. Por tanto, el grupo bancario catalán llegaría, por el momento, a un porcentaje del mercado muy limitado, pero respaldado por los 300.000 datáfonos contactless que ya existen en España.
Para comenzar a utilizar este nuevo servicio de La Caixa basta con contratar la función de pagos móviles a través de internet y, una vez que la entidad haya aceptado la petición, los datos de la app se instalarán en la tarjeta SIM del usuario. Éste podrá almacenar todas sus tarjetas bancarias, independientemente del tipo que sea, de forma segura y encriptada.
Si todo marcha según lo previsto, en enero se comenzará a distribuir el servicio a una serie de clientes seleccionados que ya estén utilizando otro tipo de tecnología sin contacto de La Caixa para sus pagos móviles. Así mismo, en febrero se produciría el lanzamiento comercial de este servicio, realizándose su presentación en el Mobile World Congress de Barcelona.

BBVA Wallet

El anuncio de La Caixa puede entenderse como una respuesta a BBVA Wallet, el servicio de pagos móviles que el BBVA presentaba a principios de este mismo mes. Gracias a esta app disponible para Android e iOS –y en un futuro para Windows Phone-, sus clientes pueden solicitar por correo ordinario una pegatina contactless para pagar a través de su teléfono móvil. Al prescindir de la excluyente tecnología NFC, BBVA Wallet permite llegar de una manera más efectiva al 90% del mercado móvil español y ofrece la posibilidad de pagar en más establecimientos, ya que no necesita TPVs ni datafonos de última generación. Además, esta app del BBVA permite al usuario conocer toda la información relacionada con sus cuentas y con sus tarjetas, pudiendo realizar operaciones como bloquear una tarjeta en caso de robo o dar de alta una nueva sin necesidad de acudir a la oficina o al cajero.

Vodafone Wallet

Sorprende especialmente la participación de Vodafone en el proyecto de pagos móviles de La Caixa y más teniendo en cuenta que hace apenas un mes anunciaba su propio servicio de transacciones móviles: Vodafone Wallet. Los pagos se realizan a través de la tarjeta de prepago Vodafone Smartpass, que cuenta con el respaldo de Visa y que está disponible de forma gratuita para los clientes de la compañía. Al igual que en el caso de La Caixa, Vodafone también ha confiado en la tecnología NFC, lo que reduce ampliamente la cuota de mercado a la que puede llegar.

Los dispositivos móviles cada vez adquieren mayor protagonismo para la monetización de aplicaciones, por lo que no es de extrañar que los pagos móviles cada vez vayan ganando más terreno. Los movimientos que las diferentes empresas implicadas directa o indirectamente en el mercado móvil indican que el dinero físico podría pasar, en un futuro no muy lejano, a ser un recuerdo del pasado. Por el momento, sólo queda esperar a que los vaticinios se cumplan y que 2014 sea realmente el punto de inflexión para el desarrollo de aplicaciones móviles especializadas para las transacciones a través de smarpthones y tablets.