Recomendaciones para implantar un proceso de Design Thinking en tu startup

El Design Thinking se suele considerar una mera rama del diseño. Sin embargo, significa mucho más que eso. Es algo que puede aplicarse a todos los ámbitos, especialmente si gestionas un negocio o si fundas una startup. En lo siguiente te ofrecemos un proceso de Design Thinking que te ayudará. 

Si estás creando una startup, significa que estás introduciendo un nuevo producto o servicio en el mercado, algo que probablemente nadie haya visto antes. ¿Cómo sabes que tu producto va a tener éxito? El Design Thinking te ayuda a responder a esta pregunta.

En otras palabras, el Design Thinking es un enfoque centrado en el ser humano, que comienza con la empatía con el público y termina con el diseño de una solución para él. 

Proceso de Design Thinking en 5 pasos

El Design Thinking se compone de 5 fases principales. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no es necesario seguirlos en un orden específico. Repasemos cada paso:

1. Empatizar. Empatizar con tus futuros clientes significa comprenderlos y obtener más información sobre sus necesidades y emociones en una situación concreta. Solo así podrás crear la mejor base para las siguientes etapas del Design Thinking que vayas a llevar a cabo.
2. Definir. El segundo paso consiste en resumir las conclusiones de la primera fase y elaborar un planteamiento del problema que te ayude a encontrar la mejor solución. Incluye tres puntos clave: el usuario, la necesidad y la motivación.
3. Idear. La tercera fase del Design Thinking está dedicada al diseño de una solución para el problema que hemos definido antes. El objetivo principal es encontrar el mayor número posible de ideas y seleccionar las mejores. La actividad más utilizada en esta fase es la técnica del brainstorming. Después hay que seleccionar las mejores ideas.
4. Prototipo. La creación de prototipos es una forma de poner a prueba tus ideas de forma económica, sin afrontar grandes riesgos. Consiste en construir una versión reducida de tu producto y ver cómo responderá tu público. Los prototipos pueden dividirse en dos categorías principales:
   • prototipos lo-fi, que son sólo una imagen parcial del producto final;
   • prototipos hi-fi, que son modelos que se acercan al producto final, tanto en apariencia como en funcionalidades.
5. Prueba. Los comentarios de los usuarios no tienen precio. Por eso este paso es crucial. En esta fase, se prueba el prototipo entre el público objetivo. Escucha sus comentarios y ajusta el diseño de tu producto si es necesario.

 

Consejos para aplicar un proceso de Design Thinking en una startup

Según CB INSIGHTS, el 42% de las startups mueren porque el mercado no necesita lo que ofrecen. Esta es la principal razón por la que deberías utilizar el Design Thinking en tu startup: puedes minimizar el riesgo de fracaso en casi un 50%.

En este sentido, aquí se presenta una metodología de Design Thinking, diseñada específicamente para las startups en sus primeros años de vida. 

Define tus buyer personas

Utiliza tu investigación de mercado y los datos para definir a tus buyer personas. Los BP son representaciones semi-ficticias de tus clientes ideales que te proporcionarán información significativa para tu empresa.

La primera etapa de Design Thinking es definir los antecedentes y datos demográficos, como el sexo, la edad, la familia y la carrera. En segundo lugar, hay que identificar sus puntos de dolor, sus objetivos y sus dudas. En función de estos buyer personas, diseña tus propuestas de valor para cada uno de ellos, abordando directamente los puntos de dolor.

Determina una solución

En función de los buyer personas que hayas definido, realiza algunas sesiones de brainstorming para idear diferentes soluciones para el problema principal. A continuación, traduce esas soluciones en características para implementarlas en tu producto. 

Si las soluciones son diferentes para cada tipo de buyer persona, intenta estructurar diferentes versiones de tu producto, como la normal y la premium. Puedes asignar cada versión a cada tipo específico de cliente.

Prueba tu producto

Después de diseñar tu oferta, es el momento de probar tu producto. Proporciona a tu público objetivo una versión limitada/prototipo de tu producto y observa cómo lo utilizan. Haz preguntas directas sobre la experiencia y comprueba si cumple sus expectativas o no.

Después de probar el producto, saca tus conclusiones y decide si hay algo que deba cambiarse. En ese caso, actualiza tu producto y vuelve a probarlo hasta que estés satisfecho con el resultado.

Lanzamiento y mejora

Después de lanzar el producto, no has terminado todavía. Recoger el feedback de los usuarios es esencial para mejorar tu oferta en el futuro.

Ten en cuenta que tener un mismo objetivo es crucial en una organización. En este sentido, el Design Thinking podría considerarse un objetivo común para todos los miembros de la empresa.

Casos prácticos: Airbnb y Credexia

Hoy en día, Airbnb es una de las empresas más conocidas del mundo. Sin embargo, en el pasado tuvieron que enfrentarse a duros retos. En 2009, sus ingresos estaban estancados y sus beneficios eran mínimos. 

Para superar esta situación, se apoyaron en el típico principio del design thinking: centrarse en sus clientes. Decidieron ir a Nueva York para mostrar a los propietarios cómo hacer y publicar mejores fotos de sus inmuebles. Al ponerse en la piel de los usuarios, obtuvieron grandes resultados, ya que consiguieron un rápido aumento de los ingresos.

En Yeeply tenemos años de experiencia en el apoyo a startups en sus primeras fases de desarrollo. En este sentido, nos gustaría mencionar a la startup fintech Credexia. Es una startup que ofrece la posibilidad de comparar diferentes servicios bancarios de forma objetiva y detallada. Todo ello acompañado de un sistema de calificación fiable y una página web fácil de usar.

El proceso de Design Thinking de Credexia comenzó con un análisis del comprador, que les ayudó a definir los puntos de dolor que debían abordar con su servicio. En consecuencia, uno de los equipos de desarrollo de Yeeply creó el sitio web. 

De este modo, obtuvieron el mejor resultado posible, sin necesidad de contratar nuevos recursos.

Conclusión:

Ahora que sabes lo importante que es el proceso de Design Thinking, es el momento de implementarlo en tu startup. Sin embargo, queremos recordarte algunos puntos importantes. 

En primer lugar, asegúrate de que los profesionales que elijas, sepan lo que hacen. Intenta comprobar si ya han realizado proyectos similares al tuyo. De esta manera, serán más eficientes.

En segundo lugar, ten en cuenta que tanto el equipo de diseño como el de desarrollo deben trabajar mano a mano para ofrecer el mejor producto. Si no hay una comunicación adecuada entre las dos partes, el resultado no será como esperabas y no reflejará tu visión inicial.

Yeeply, junto con sus múltiples equipos certificados, tiene una larga experiencia en la prestación de servicios multidisciplinares a las startups que quieren basar sus actividades principales en el mundo digital. Si quieres saber más sobre el design thinking y lo que supone iniciar un proyecto con nosotros, cuéntanos tu idea. ¡Estaremos encantados de ayudarte!